China es el mayor productor mundial de ropa y calzado. La razón principal para importar ropa y accesorios chinos suele ser la falta de localización de costos: mudarse a un país con costos de fabricación más bajos sin comprometer la calidad del producto en comparación con algunos de sus competidores en la producción textil. De esta forma, empresas españolas y no españolas producen productos en China y luego importan los productos a España. Sin embargo, según las últimas estadísticas, el proceso de subcontratación offshore se ha estabilizado en los últimos años.