Recordaremos el año 2022, como uno de los años más complicado dentro de nuestro sector. Se caracterizó especialmente por una capacidad limitada de espacio de los barcos portacontenedores y unos fletes inusualmente altos. Según los datos que hemos podido recopilar de varias fuentes dentro del sector, la situación comenzó a remitir en la segunda mitad del año y la misma tendencia se observa según nos hemos acercado al 2023. Según la opinión de varios expertos en nuestro sector, aun existe una alta volatilidad de los precios que perturba la industria del transporte de contenedores. Esto se debe a un elevado excedente de barcos portacontenedores y una mayor afluencia de contenedores en 2023. Esto va a provocar que las compañías navieras continúen reduciendo la capacidad de los buques y suspendan servicios, lo que derivara sin duda alguna en cancelaciones de salidas o ¨blank sailings¨.
Recientemente, una de las compañías navieras con mayor número de buques propios comunico que seguirán haciendo de capacidad en los trades de ASIA – USA, ASIA – NORTE EUROPA y ASIA MEDITERRANEO para poder responder a la fluctuación de la demanda. Esta tendencia de reajuste se replicará en todos los actores de la industria.
Para 2023, es muy probable que estalle una guerra de tarifas a gran escala. Las limitaciones de capacidad que hemos visto en los últimos dos años no van a volver. Lo que significa que la industria dispone de más buques y más contenedores de los que actualmente la demanda requiere.
Muy probablemente esta situación conduzca a las compañías navieras a reducir los fletes hasta el punto de ¨brake even¨ y que el mercado se vaya asentando de nuevo durante los próximos años. Los cargadores tendrán oportunidad de negociar por volúmenes y se abrirán nuevas posibilidades de negociación que antes no existían. Así mismo seremos testigos de los grandes esfuerzos que se realizaran para diversificar los centros de producción durante los próximos años, sobre todo fuera de China. Veremos un aumento sin precedentes de los volúmenes de contenedores desde Asia y más países se convertirán en alternativas potenciales como Vietnam, India, etc.
Transitarias en 2023
«En un entorno en el que los márgenes de beneficio de los transportistas y los minoristas se están reduciendo, el diferencial se encontrará en los costes». Los directivos buscarán formas de mejorar la eficiencia y la sustentabilidad corporativa. La tecnología les brindará una gran oportunidad para reducir el riesgo a través de la visibilidad y la transparencia de los datos, mientras mantienen una lista saludable de socios comerciales que ayudara mucho a esta nueva etapa.
El estricto control de los costes será la principal prioridad de los transitarios en 2023. Aunque las negociaciones con las navieras serán intensas por un lado, por otro lado, la optimización de costos de las operaciones de los transitarios será muy importante. Los gastos generales como primas de seguros, daños, etc., se controlarán de cerca.
Sobreabastecimiento
Los precios de los contenedores se dispararon poco después de la pandemia, no había suficientes contenedores para satisfacer la creciente demanda, y fue entonces cuando los mayoristas y los importadores comenzaron a almacenar mercancía para evitar la histórica congestión portuaria. Al comienzo de la temporada 2022, los volúmenes de contenedores en los principales puertos de importación alcanzó niveles récord. Ahora que las empresas han stockado y los almacenes están llenos, la demanda está cayendo drásticamente. La inflación y la crisis energética han llevado a un consumo cauteloso, lo que repercutirá en la industria.